¿No sabes el tipo de cerradura que tienes en casa? ¿Te gustaría saber las diferentes opciones que existen? En este post he reunido las cerraduras más comunes para que veas sus diferencias y el funcionamiento de cada una de ellas.
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Índice
Cerraduras cilíndricas
Se las conoce también como cerraduras de cilindro europeo, y se trata de un modelo que se utiliza con frecuencia en las puertas de entrada de las viviendas.
Su eje central se compone de un cilindro que es el que dispone de todo el engranaje con los pistones. En ocasiones se puede sustituir este cilindro sin cambiar toda la cerradura, pero no siempre es posible.
Cerraduras de sobreponer
Este tipo de cerraduras están especialmente pensadas para puertas de escaso grosor. Cuando el espesor es menor de 4 centímetros lo mejor es optar por una cerradura de sobreponer.
Se colocan en la parte interior de la vivienda, de manera que queda totalmente oculta desde el exterior de la misma.
Además, se pueden utilizar para ampliar la seguridad de una puerta, utilizándola como una cerradura añadida. Esto nos permitirá añadir más puntos de sujeción.
Cerraduras empotradas
Las cerraduras empotradas se las conoce también como cerraduras embutidas, y son aquellas que se instalan en el interior de la puerta.
Al estar empotrada solo queda visible la hendidura por lo donde se introduce la llave, dejando el resto del mecanismo oculto desde fuera de la vivienda.
En el interior se suele añadir una manivela para accionar la cerradura sin tener que recurrir a la llave.
Pueden utilizarse tanto en puertas de madera como en puertas metálicas. Se trata de uno de los modelos más extendidos en la actualidad.
Cerraduras multipunto
En el caso de las cerraduras multipunto su zona de acción se extiende por todo el lateral de la puerta. Es un tipo de cerradura de seguridad, por lo que dispone de un mecanismo más avanzado.
Su funcionamiento es el siguiente: dispone de una barra que recorre el lado vertical de la puerta, accionando diferentes pestillos en varios puntos de la puerta.
Lo que consigue con esto es que se generen varios anclajes a diferentes alturas de la puerta. Esto eleva muchísimo el nivel de seguridad, ya que será más difícil de derribar. Se usa con mayor frecuencia en las puertas acorazadas o blindadas.
Cerraduras electrónicas
Todas las cerraduras que hemos visto anteriormente se accionan con una llave. Pero con el avance de la tecnología aparecieron las cerraduras electrónicas, que no necesitan de una llave física para utilizarse.
Son muchos los sistemas que se emplean: un mando, un lector de huella dactilar, la conexión Wi-Fi… Las modalidades son enormes.
Se utilizan frecuentemente en hoteles, pero cada vez son más las viviendas que quieren prescindir del clásico llavero y optan por modernizarse.
Cerraduras invisibles
Se trata de una variante de las cerraduras electrónicas pero con una característica importante: quedan totalmente ocultas desde el exterior de la vivienda.
Lo que se busca con esto es poder añadir una cerradura que sea imposible de forzar. Al no tener acceso a ella desde el exterior de la casa es imposible intentar manipularla. Para ello se colocan en la parte interior de la puerta, de forma que sólo es accesible desde la vivienda.
Para accionarla se puede utilizar un mando o el propio teléfono móvil. Puede utilizarse como cerradura principal, pero lo ideal es emplearla como un complemento para aumentar la seguridad.
A lo largo del post has podido comprobar que son muchos los modelos que hay disponibles en la actualidad. Es por ello que no te debes conformar con la cerradura que ya tengas, sino que debes buscar la que mejor encaje en tu situación.
Si lo deseas puedes contactar con una empresa como Nocte Cerrajeros (Castellón) y ellos se encargarán de instalarla correctamente.
La seguridad en el hogar es un aspecto muy importante, y la primera capa de seguridad pasa por tener una cerradura de calidad.
Por muy buenos que sean el resto de elementos del hogar, si la cerradura es fácilmente manipulable, cualquier intruso podrá entrar en nuestro hogar.