Aprende a aislar las ventanas de tu casa adecuadamente


El coste de mantener la casa caliente es de los gastos más altos que tenemos durante el año. Ya sea mediante calefacción eléctrica o de gas, mantener una temperatura cálida supondrá una parte del sueldo. Por eso cualquier ayuda es bienvenida.

Son varios los factores que influyen en la eficiencia de nuestra calefacción (o refrigeración), pero desde luego las ventanas es un punto importante. Aprende a aislar las ventanas de tu casa para minimizar la inversión que realizas en este punto.

Es un gesto que tendrás que realizar una vez y del que te aprovecharás cada año que pase. Vamos a repasar cuáles son estas medidas.

Aislar las ventanas para evitar fugas de aire

Las ventanas son uno de los elementos que componen la estructura del hogar por los que existe la mayor fuga de calor interno.

Por ello, es importante saber prepararlas, ya sea mediante persianas, cortinas o diversas técnicas de aislamiento, para prevenir que un mal aislamiento afecte al clima del hogar que queremos mantener.

Las ventanas de doble vidrio (las que poseen dos capas de vidrio con una separación entre ellas) permiten un ahorro que puede ascender hasta al 50% de la calefacción.

Si bien su coste inicial es mayor al de las ventanas de vidrio simple, se trata de un dinero que recuperarás rápidamente y que te servirá durante muchos años.

Pero claro, no siempre tenemos un presupuesto disponible como para cambiar toda la carpintería del hogar. Es allí cuando tenemos que tirar de imaginación, poniendo en práctica técnicas y consejos de ahorro para lograr un adecuado aislamiento de nuestro hogar.

Consejos para reparar filtraciones de aire

Hay dos puntos a tratar para aislar las ventanas: las juntas de la carpintería y el cristal. También recuerda que si tienes persianas enrollables su caja de contención también debe ser aislada.

Para tratar las juntas de la carpintería debes asegurarte de evitar las filtraciones de aire. Para ello coloca burletes de goma, caucho o espuma de goma, cubriendo así todos los hilos y espacios que pudiera haber.

Si la fuga de aire se produce entre la pared y el marco de la ventana tendrás que sellar esos huecos. Para ello puedes utilizar una pistola de silicona o masilla, dependiendo de la estructura de tu casa.

El objetivo es que cualquier grieta o separación que pueda haber entre el muro y la ventana desaparezca. Si las tapas, dejará de entrar el aire frío durante el invierno.

El vidrio o cristal simple es muy buen transmisor de la temperatura. Por ello, debemos aislarlo ya sea con cortinas (de tela, de madera, de papel) o con elementos decorativos, tales como vinilos decorativos con diseños, o bien vinilo incoloro en toda la superficie, que aportarán un poco de aislación al vidrio.

Otro lugar que debes inspeccionar es la unión entre el vidrio y el marco de la ventana. Si encuentras alguna ranura puedes rellenarlas con silicona transparente, fijándote que entra bien en el hueco para taparlo. Así evitarás esas fugas en los posibles espacios entre el cristal y el marco.

Cuidado con la caja de la persiana

La caja donde se guarda la cortina enrollable puede ser también aislada. Para ello necesitarás aislante específico para estos cajetines. Los venden en las tiendas online y aunque es un poco engorroso de colocar después no tendrás que preocuparte por él y aislará durante años.

Se trata de retirar la tapa del cajetín y colocar material aislante para que cubra toda la superficie. Una vez colocado podrás volver a colocar la tapa y habrás ahorrado las fugas de calor por ese punto.

También debes observar el hueco por el que sale la correa de la persiana. Si tu casa es antigua puede que falle en este punto. Para saber si entra aire acerca una vela encendida en un día de viento.

Si observas que se mueve la llama es que hay una fuga de calor. En ese caso deberás comprar un aislante y cubrir ese hueco.

Anterior

Cómo decorar utilizando escaleras de madera

Cómo limpiar la ducha de tu casa

Siguiente

Deja un comentario