La factura de la luz es un gasto fijo que hay que pagar en todas las viviendas. El problema es que hay veces que este gasto se dispara, y nos supone una cantidad importante de nuestra nómina.
Para minimizar este consumo al máximo te traigo 7 consejos con los que podrás reducir tu factura de la luz de forma sencilla.
Elige la tarifa de luz más barata
Busca y compara entre las mejores tarifas luz. Esto es esencial para pagar menos electricidad en el hogar.
Para encontrarla debes fijarte tanto en el término de energía (kWh) como en el término de potencia (kW). Ambos afectan al importe que pagas a final de mes.
Tendrás que dedicar algo de tiempo, ya que son muchas las comercializadoras que existen actualmente y con las que puedes contratar tu suministro eléctrico.
Pero si buscas una tarifa de luz barata, considera seriamente Pepeenergy. Tiene unos precios muy económicos.
Ajusta tu término de potencia
Como hemos visto anteriormente pagarás tanto por la energía como por la potencia. Una vez localizada una tarifa de luz económica podrás reducir tu consumo de energía, pero también puedes ahorrar bajando el término de potencia.
Para saber lo que necesitas contratar tendrás que hacer algunas sumas. Anota las potencias de los electrodomésticos y aparatos que utilices normalmente.
Piensa en cuáles usas de forma simultánea, por ejemplo el microondas y la vitrocerámica, o el secador y la lavadora. Todos los que utilices en el mismo intervalo de tiempo súmalos.
Puesto que habrás agrupado los consumos (nunca utilizas todos los aparatos de golpe) obtendrás varias potencias resultantes.
La mayor de ellas será el término de potencia que debas contratar. Normalmente se puede contratar algo menos, ya que no todos los consumos son constantes en el tiempo.
Por ejemplo, el horno hace encendidos y apagados para mantener la temperatura, por lo que la potencia se utiliza de forma intermitente. Esto te permitirá tener una potencia contratada ligeramente inferior a la de tu cálculo.
Elimina por completo el stand-by
El stand-by es un devorador silencioso de energía. Utilizamos este concepto para definir la energía que consume un electrodoméstico cuando está apagado.
Por ejemplo, cuando apagamos la televisión, debemos saber que no está 100% apagada. Observaremos que se queda un pequeño piloto rojo encendido. Esto quiere decir que aunque la pantalla está apagada, dentro tiene alguna función todavía encendida.
Estos consumos, aunque son pequeños, están siempre ahí. Las 24 horas del día. Y para eliminarlos por completo lo mejor es utilizar regletas.
Conecta los aparatos y electrodomésticos a la regleta y simplemente apaga el botón de la misma cuando no los utilices.
Esta es la mejor manera de asegurarnos de que no hay ningún consumo fantasma.
Opta siempre por electrodomésticos eficientes
Cuando vayas a adquirir un nuevo electrodoméstico fíjate en la etiqueta energética. Se trata de un tipo de información muy visual que te indica cuál es el consumo en condiciones estándar.
Al coger electrodomésticos eficientes sabrás que obtendrás las mismas prestaciones que otros electrodomésticos pero con un menor consumo de electricidad.
Esto se consigue gracias a las mejoras en su construcción y diseño. Algunos, como la nevera, tendrán mejor aislamiento. Otros, como el lavavajillas, necesitarán menos energía para limpiar los platos gracias a su sistema de lavado.
Es en definitiva una medida muy fácil de implementar y
que nos ahorrará dinero a la larga.
Mejora el aislamiento del hogar
Buena parte de nuestro consumo energético lo destinamos a calentar o enfriar nuestra vivienda.
Si mejoramos el aislamiento térmico del hogar estaremos reduciendo estos consumos, ya que la temperatura en el interior será más estable.
Para mejorar el aislamiento hay que actuar en varios puntos:
- Mejorar la calidad de los marcos y los cristales de las ventanas
- Minimizar las filtraciones de aire de las puertas
- Mejorar el aislamiento térmico de las paredes
Son medidas cuyo coste es más elevado que el resto pero la mejora que obtenemos con ellas es enorme. Merece la pena hacer este gasto, ya que luego obtendremos un mayor beneficio al pagar menos en nuestras facturas energéticas.
Cocina de manera eficiente
La cocina es la estancia donde más electricidad se consume. Cuando cocinamos, utilizamos mucha energía, y eso luego se nota en la factura de la luz.
Para gastar menos luz lo mejor es que sigas los siguientes consejos:
- Utiliza las cazuelas con tapa
- Nunca abras el horno mientras está encendido
- Utiliza siempre que puedas la olla express
- Apaga unos minutos antes la vitrocerámica para aprovechar el calor residual
- No metas alimentos calientes en la nevera
Si te acostumbras a seguir estas instrucciones notarás como día a día consumes menos electricidad en la cocina.
Sustituye todas las bombillas por LED
Muchas veces nos pensamos que tenemos todas las bombillas de la vivienda con tecnología LED, pero normalmente no es así.
Hay bombillas que se nos olvidan. Ocurre frecuentemente con los tubos fluorescentes de la cocina, las bombillas del espejo del baño o las lámparas de estudio.
Para saber si tu bombilla es de otra tecnología menos eficiente acerca la mano a ella mientras esté encendida, y si desprende calor, sabrás que no se trata de una bombilla LED.
Hoy en día existen todos los modelos de bombilla en versión LED, por lo que solo tendrás que acercarte a tu tienda favorita con la bombilla antigua y buscar el sustituto LED.