Son muchos los consumos de nuestro hogar que hacen que nos llevemos las manos a la cabeza a final de mes. Algunos son complejos de reducir, como el gasto en calefacción, pero hay otros más sencillos. Este es el caso de la iluminación.
Saber cómo funciona la iluminación es importante para conseguir reducir el gasto de nuestras facturas. La buena noticia es que es fácil de hacerlo, y una vez implementas las mejoras ya te puedes olvidar de ella. Ya estarás ahorrando mes a mes.
En este post quiero mostrarte todos los consejos de ahorro, desde la compra de la lámpara hasta el uso de la iluminación en el día a día.
Índice
Cómo ahorrar al comprar lámparas
El primer momento en el que puedes ahorrar en la iluminación de tu hogar es al comprar la lámpara. Todos sabemos ir a Ikea y comprar la lámpara más barata (y sin personalidad), pero lo cierto es que hay otras alternativas.
Una de ellas es buscar en tiendas online. La ventaja que tienen es que al no necesitar un local o nave abierto al público pueden ahorrarse muchos costes, y esto se repercutirá en precios más baratos. Y en este post quiero darte a conocer una de ellas: Orion91.
Se trata de una empresa afincada en Xeresa (Valencia) y que lleva más de 20 años en el sector de la venta de productos de electricidad y hogar.
Si todavía no los conoces te recomiendo que eches un vistazo a su sección de lámparas baratas, ¡verás como es posible conseguir una lámpara de diseño y con personalidad a un precio ridículo!
Ahora bien, la compra de la lámpara es el primer punto en el que puedes ahorrar, pero hay otros factores que influirán directamente en el coste de tu factura eléctrica. Vamos a ver cuáles son.
Cómo iluminar tu casa para ahorrar electricidad
Saber qué tipo de luz poner y como dirigirla es fundamental para hacer un uso eficiente.
– Elige las bombillas correctas
Aquí hay una cuestión que deberías tener bien clara: todas las bombillas de tu hogar deberían ser de tipo LED. ¿Te queda todavía alguna bombilla incandescente? Entonces busca ya mismo un reemplazo.
Pero no solo eso, también deberías saber que existen varios tipos de bombillas LED en cuanto al tipo de luz que ofrecen. Son las siguientes:
- Cálida: temperatura de color entre 2800ºK y 3500ºK
- Neutra: temperatura de color entre 3800ºK y 4500ºK
- Fría: temperatura de color de más de 5000ºK
Aquí deberías adaptar el tipo de luz en función de la estancia que vayas a iluminar.
En líneas generales, la luz cálida deberá ir en zonas de descanso y relajación, la luz fría para estancias en las que se va a trabajar o se necesita muy buena iluminación y la luz neutra se podrá utilizar para el resto de situaciones.
Si colocas una luz cálida en una zona de trabajo notarás falta de iluminación, y seguramente acabes colocando algún punto de luz extra. Debes tener la temperatura de color muy en cuenta.
– Haz un correcto uso de las lámparas
Son muchos los tipos de lámparas que puedes poner: de techo, de pie, de mesa… y cada una ofrece un tipo de iluminación diferente. Por ejemplo, una lámpara de techo dará una iluminación más general, mientras que una lámpara de mesa ofrecerá un punto de luz adicional.
Aprovecha esto y coloca puntos extra de luz en zonas de estudio o de lectura. De esta manera, evitarás tener que iluminar toda la estancia a una intensidad necesaria para leer. Tendrás una luz general más tenue pero un extra de luz en el libro.
También deberías seguir este ejemplo en zonas de trabajos. Si iluminas de forma inteligente evitarás tener más bombillas encendidas de las necesarias.
– Aprovecha la luz natural
La lámpara que menos consume es la que no se enciende. Esto puede parecer algo obvio, pero no siempre lo tenemos presente.
Intenta en la medida de lo posible levantar todas las persianas y correr las cortinas en las horas del día en las que luce el sol. Así dejarás que entre toda la luz natural (que además es gratuita).
Pero no sólo esto, también es recomendable utilizar colores claros para las paredes y los muebles. Si utilizas tonalidades oscuras para decorar tu hogar debes saber que se reducirá la cantidad de luz que se refleja en su superficie. Esto dará lugar a estancias más oscuras.
Como has podido ver a lo largo de todo el post no se trata de mejoras complejas. Con comprar una lámpara barata y utilizar la iluminación de forma inteligente reducirás el gasto al mínimo.
Después ya solo tendrás que estar pendiente de no dejarte las luces encendidas y aprovechar la luz natural. Pero al menos la base la tendrás y tus facturas de la luz serán más bajas que antes.