¿Estás pensando en hacerte con un extintor para tu hogar? ¿No sabes cuál es su vida útil? En este artículo te voy a dar toda la información necesaria para entender lo que conlleva tener un extintor.
Descubrirás en qué zonas de la casa tienen más sentido, los tipos de extintores que puedes encontrar y cuándo debes hacer la recarga de extintores.
Índice
¿Para qué sirven los extintores?
Antes de nada quiero que tengas muy claro para qué sirven los extintores.
La extinción de incendios puede ser un proceso peligroso y que requiere mucho tiempo. Por ello, los profesionales de la seguridad suelen preferir evitarlos adoptando medidas preventivas.
Pero como no todo siempre sale como deseamos debemos contar con la posibilidad de que se genere un incendio en el momento menos pensado.
El objetivo principal de los extintores es extinguir o controlar los incendios pequeños para que no se propaguen y provoquen un incendio incontrolado.
De hecho, es mejor apagar un fuego pequeño lo antes posible porque puede quedar suficiente combustible para reavivar el fuego más adelante si está latente.
Extinguir el fuego original también puede causar menos daños a los edificios circundantes, ya que no habrá nada que pueda encender las otras llamas más grandes.
Por eso, aunque hablemos del hogar, la presencia de un extintor nos va a dar un extra de seguridad.
¿Se puede tener un extintor en el hogar?
El principal problema de los extintores es que puede que no haya tiempo para utilizarlos, sobre todo en el caso de incendios de gran envergadura.
Sin embargo, si vives en una casa con niños o mascotas, puede ser útil tener un extintor a mano. Tener uno cerca puede hacer que todos tus esfuerzos parezcan mucho más seguros y razonables.
Para que te hagas una idea de sus ventajas, vamos a repasar los lugares más frecuentes para tener un extintor:
- Cocina: en la cocina, especialmente si tenemos cocina de gas, es donde más posibilidades existen de que se inicie un incendio.
- Taller o trastero: si dedicas una zona de tu vivienda para usarla como taller debes saber que es muy recomendable tener un extintor. El uso de muchas herramientas puede dar lugar a un pequeño fuego, y poder controlarlo desde el primer momento es clave.
- Salón con chimenea: los fuegos en el interior de la chimenea están muy controlados, pero siempre existe la posibilidad de que salte una chispa a alguna superficie inflamable. No subestimes la chimenea del hogar.
- Zonas de paso: cualquier zona de paso es buena para albergar un extintor. Cualquier enchufe o electrodoméstico puede estar defectuoso y comenzar un fuego, por lo que agradecerás tener un extintor a mano.
Como ves no son pocas las zonas donde tiene sentido poner un extintor. Ahora que ya las hemos repasado vamos a ver los tipos principales que existen.
¿Qué tipos de extintores existen?
Hay varios tipos de agentes extintores disponibles: agua, polvo seco, espuma, dióxido de carbono, gas… Cada tipo tiene sus propias ventajas para aplicaciones específicas. Vamos a verlas:
- Extintores de agua: muy fáciles de conseguir, este tipo puede utilizarse contra los incendios de clase A que impliquen la quema de productos de papel, madera, textiles y la mayoría de los plásticos. Constan de un depósito con un volumen de 6 a 8 litros para almacenar agua a presión.
- Extintores de espuma: tienen un gran volumen en proporción a la cantidad de productos químicos que contienen. El principal problema de este tipo es que crea una película aislante sobre los líquidos ardientes que impide el efecto de enfriamiento, impidiendo la extinción de pequeños incendios. Además, puede ser difícil utilizarlos contra incendios de aceite de motor, gasolina u otros líquidos que contengan hidrocarburos.
- Extintores de dióxido de carbono: el CO2 no deja ningún residuo al evaporarse y funciona bien en fuegos de clase B con líquidos inflamables como grasa, aceite o gas. Se recomienda para los fuegos eléctricos ya que no conduce la electricidad y funciona bien contra los incendios que afectan a equipos delicados, como los ordenadores.
- Extintores de polvo: Este tipo de extintor funciona bien contra los incendios de metales inflamables, como el magnesio o el titanio. Aunque también puede apagar otros tipos de fuego, es menos eficaz que los gases halón.
¿Cada cuanto hay que cambiar un extintor?
Ahora que hemos hecho un repaso por los puntos más importantes vamos a ver cada cuánto se debe cambiar un extintor.
En primer lugar tenemos la vida útil, que se establece en 20 años. Esto quiere decir que una vez pasado este tiempo, sí o sí debemos reemplazar el extintor. Pero antes de esta fecha debemos tener en cuenta otras.
Cada 5 años es necesario realizar un retimbrado. Esto no supone la sustitución del extintor, pero es obligatorio para comprobar la efectividad del mismo.
Además de esto, se debe revisar de forma trimestral tanto la accesibilidad como la señalización. Uno de los aspectos más importantes es que el extintor debe estar totalmente accesible, y con esta revisión se confirma que así sea.
Tras este completo repaso te recomiendo que consideres comprar un extintor para tu vivienda.
Cuando hablamos de la seguridad de nuestra familia debemos de poner todo de nuestra parte. Y esta medida de seguridad puede marcar la diferencia.